El proyecto de ampliación del Metro de Quito dio un paso decisivo tras obtener el respaldo de la banca multilateral. La CAF, Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe, aprobó un crédito por USD 80 millones que permitirá financiar parte de la extensión de la Primera Línea, específicamente en el tramo subterráneo que conectará El Labrador con La Ofelia, en el norte de la capital.
El financiamiento, aprobado por el directorio del organismo internacional, se interpreta como una señal de confianza en la viabilidad técnica y económica del proyecto, que busca ampliar el alcance del sistema de transporte más importante de la ciudad.
La obra contempla la construcción de un túnel de aproximadamente 5,3 kilómetros y cuatro nuevas estaciones: Bicentenario, Andalucía, Rosario y Ofelia. Con esta ampliación, más de 70 barrios del norte de Quito se verán beneficiados, impactando directamente a unas 500 mil personas que actualmente enfrentan largos tiempos de desplazamiento y congestión vehicular.
Uno de los cambios más significativos será la reducción del tiempo de viaje. En horas pico, el trayecto entre El Labrador y La Ofelia pasará de tomar cerca de 48 minutos a apenas 8, una diferencia que promete aliviar el tráfico y mejorar la calidad de vida de miles de quiteños.
Mientras avanza el financiamiento, el proyecto aún enfrenta desafíos administrativos. El proceso de contratación de los estudios de ingeniería definitivos se encuentra en revisión, luego de que el Servicio Nacional de Contratación Pública solicitara información adicional sobre la fase preparatoria. Desde el Metro de Quito se informó que la documentación fue entregada dentro de los plazos establecidos y se espera que el trámite pueda continuar sin mayores contratiempos.
Otro punto clave pendiente es la autorización de endeudamiento por parte del Ministerio de Economía y Finanzas. El Municipio de Quito presentó la solicitud hace más de un año, pero hasta ahora no ha recibido una respuesta oficial, requisito indispensable para avanzar con la ejecución de la obra.
A pesar de estos obstáculos, el aval financiero de la CAF mantiene vivo el proyecto y refuerza la apuesta por ampliar el Metro como eje central de la movilidad urbana. La extensión hacia La Ofelia se perfila como una de las obras más relevantes para el futuro del transporte en Quito, en una ciudad que busca soluciones sostenibles frente al crecimiento del tráfico y la demanda de movilidad.

