Shamsud-Din Jabbar llegó a tener un buen salario cuando trabajó para dos de las firmas de servicios profesionales más grandes de Estados Unidos, pero después de vio agobiado por varios divorcios y deudas de tarjetas de crédito e hipotecas.
El sospechoso colocó explosivos caseros en neveras portátiles, abandonó el lugar y luego regresó para atropellar y disparar a la multitud, según el portavoz del FBI.
Este indicó que, tras realizar cientos de entrevistas, revisar sus redes sociales y sus dispositivos electrónicos, todo apunta a que Jabbar actuó solo y no tuvo cómplices, si bien aclaró que ha pasado muy poco tiempo para confirmarlo y la investigación sigue en curso.
Las autoridades han ofrecido varios detalles sobre la vida y trayectoria del sospechoso que pueden resultar clave para armar las piezas de este caso.