El Gobierno de Los Estados Unidos avanza en su ofensiva, tal como lo prometió, de incautar barcos petroleros cerca a las costas de Venezuela.
Se trataría de la segunda operación de este tipo durante este fin de semana y el tercer buque petrolero incautado frente a costas de Venezuela.

Aseguran desde el medio que la información que adelanta la Guardia Costera de Estados Unidos fue revelada por funcionarios del Gobierno Trump, quienes pidieron mantener su condición de anonimato.
“Robo y secuestro”
El régimen de Nicolás Maduro condenó este sábado el “robo y secuestro” del segundo buque petrolero y denunció la “desaparición forzada” de su tripulación, según indicaron en un comunicado.
“Estos actos no quedarán impunes”, dice el texto. “Los responsables de estos graves hechos responderán ante la justicia”, afirma el comunicado publicado en redes sociales por la vicepresidenta del régimen venezolano, Delcy Rodríguez.

Una publicación del Departamento de Seguridad Nacional identificó al buque como el Centuries y afirmó que era “sospechado de transportar petróleo sujeto a sanciones estadounidenses”.
Centuries es un petrolero de propiedad china con bandera de Panamá, según TankerTrackers, un servicio en línea que monitorea envíos y almacenamiento de petróleo.
Se indicó que el Centuries cargó 1,8 millones de barriles de crudo en un puerto venezolano a principios de este mes antes de ser escoltado fuera de la zona económica exclusiva de Venezuela el 18 de diciembre. La base de datos VesselFinder también registró la última ubicación del barco frente a la costa venezolana.
Una revisión de AFP determinó que el Centuries no aparece en la lista del Departamento del Tesoro de Estados Unidos de empresas e individuos sancionados.
La portavoz adjunta de la Casa Blanca, Anna Kelly, dijo en una publicación en X que el petrolero “contenía petróleo sancionado de PDVSA”, en referencia a la petrolera estatal de Venezuela, y acusó al barco de ser “un buque con bandera falsa que opera como parte de la flota en la sombra venezolana”.
“No nos va a intimidar”
El 10 de diciembre, fuerzas estadounidenses incautaron un gran petrolero frente a las costas de Venezuela, que, según la secretaria de Justicia de Estados Unidos, estaba involucrado en el transporte de petróleo venezolano sancionado hacia Irán.
Estados Unidos lleva meses construyendo un importante despliegue militar en el Caribe con el objetivo declarado de combatir el narcotráfico en América Latina, pero con un énfasis particular en Venezuela.

El ministro de Defensa del régimen de Venezuela, Vladimir Padrino López, se pronunció sobre la incautación del petrolero en un acto en Caracas transmitido por televisión estatal, aunque sin mencionarlo específicamente.
“Estamos librando una batalla contra la mentira, manipulación, contra el intervencionismo, la amenaza militar, la guerra psicológica y el terrorismo psicológico”, dijo Padrino, y agregó que eso “no nos va a intimidar”.
Actualmente, hay 11 buques de guerra estadounidenses en el Caribe: el portaaviones más grande del mundo, un buque de asalto anfibio, dos buques de transporte anfibio, dos cruceros y cinco destructores.
*Con información de AFP

