A 10 días del doble asesinato de Rob y Michelle Reiner, nuevos detalles salen a la luz en el macabro crimen que sigue impactando al mundo.
La revelación de los certificados de defunción de Rob y Michele Reiner da nuevos detalles sobre cómo murió la pareja el 14 de diciembre de 2025 en su casa en Los Ángeles.
De acuerdo con información revelada por TMZ y People el 23 de diciembre, se conoció que Rob Reiner, de 78 años, fue hallado primero alrededor de las 3:45 p. m., y Michele, de 70, un minuto después.
La causa precisa de la muerte, según los certificados, fue “múltiples heridas punzantes con cuchillo”, que causaron la muerte en minutos y fueron clasificadas como homicidio.

Dentro de los nuevos detalles del macabro crimen, Daily Mail reveló que Nick Reiner, principal sospechoso, se hospedó en la habitación 207 en The Pierside Santa Monica alrededor de las 4 a. m. del domingo. Ese mismo día, en horas de la tarde, personal del hotel entró en la habitación de Nick y encontró que la ducha estaba “llena de sangre”, con salpicaduras en la cama. Los detectives encontraron que las ventanas de la habitación estaban cubiertas con sábanas.
Una fuente anónima que conversó con el mismo diario aseguró que la pareja fue degollada; sin embargo, en los certificados oficiales no se menciona ese detalle.
Romy y Jake Reiner, los otros dos hijos de la pareja, emitieron un comunicado en el cual aseguraron que “la horrible y devastadora pérdida de nuestros padres, Rob y Michele Reiner, es algo que nadie debería experimentar”.
Los hermanos también aseguraron que “no eran solo nuestros padres; eran nuestros mejores amigos. Estamos agradecidos por la efusión de condolencias, amabilidad y apoyo que hemos recibido no solo de familiares y amigos, sino de personas de todos los ámbitos de la vida”.
También anunciaron que los cuerpos de sus padres, entregados el 19 de diciembre, fueron cremados en el Mount Sinai Mortuary.
Nick Reiner, hijo del director de cine de 32 años, cuenta con historial de esquizofrenia y adicciones y enfrenta dos cargos de asesinato en primer grado sin fianza. Reportes iniciales lo señalan como principal sospechoso, arrestado tras el descubrimiento de los cuerpos por parte de su hermana Romy, quien alertó sobre un “familiar peligroso”. La fiscalía ya calificó los hechos de “brutales” y existe la posibilidad de cadena perpetua o pena capital.

