Con una inversión de 1.6 millones de dólares, Nueva York busca impulsar un proyecto para reducir los tiempos de respuesta policial, conectando botones de pánico con el centro de comando del Departamento de Policía de Nueva York.
Un plan que busca reducir los puntos críticos de la ciudad
El alcalde Eric Adams, hizo el anuncio de esta estrategia durante una conferencia de prensa frente a una tienda en el Bronx, y explicó que los botones serán instalados en bodegas ubicadas en áreas identificadas como puntos críticos de criminalidad.
La instalación de los dispositivos estará a cargo de la empresa SilentShield y hasta el momento, por razones de seguridad, se desconoce el nombre de los lugares que se verán beneficiados con esta acción, de acuerdo a lo que se registra en Newsweek
Los incidentes violentos que se han registrado en la ciudad, han dado paso a esta medida. Entre los casos más recientes se encuentra el asesinato de un hombre de 33 años al ser apuñalado múltiples veces dentro de una bodega en Harlem.
Otro de los casos registrados ocurrió el mes pasado cuando u grupo de sospechosos disfrazados como oficiales del NYPD atacó en una tienda en Bedford-Stuyvesant, Brooklyn, a un grupo de trabajadores, para robar el local.
Con esta iniciativa se busca, básicamente, proteger a los trabajadores y a los propietarios de las bodegas. Pero también es un claro mensaje para que los delincuentes desistan de sus continuos ataques.
“En lugar de solo tener gatos para mantener alejadas a las ratas, ahora tendremos una conexión directa con la policía para mantener alejados a esos peligrosos ‘gatos’ que intentan robar nuestras tiendas”, afirmó Eric Adams.
Beneficios de los dispositivos de seguridad
Durante la mencionada conferencia de prensa, el jefe del Departamento del NYPD, John Chell, destacó los beneficios d este tipo de dispositivos, enfatizando en que no solo traerán tranquilidad a los trabajadores, sino que también harán parte de una estrategia para prevenir el crimen en Nueva York.
“Permiten una respuesta rápida ante situaciones potencialmente violentas, proporcionan a los oficiales información crucial para mantenerse seguros y ayudan en la captura de sospechosos. En última instancia, estos dispositivos contribuyen a mantener a todos a salvo y envían un mensaje claro”, afirmó Chell.
Se sabe que la instalación de los botones de pánico comenzará a hacerse realidad en las próximas semanas, y será financiada a través de una subvención de emergencia otorgada a la UBA.
Una vez instalados estos dispositivos de seguridad, se fortalecerá la confianza de los trabajadores y la comunidad en la capacidad de respuesta de las fuerzas del orden.
