
Rusia está acusada de “amenazar” a otra nación europea tres años después de su invasión a Ucrania.
Se ha afirmado que el presidente ruso, Vladimir Putin, podría haber puesto la mira en Azerbaiyán tras aumentar sus tropas en una base militar en un país aliado cercano.
El incremento de la presencia en el centro de Gyumri, en Armenia, fue en un principio desmentido por ambas partes, tanto por las autoridades armenias como por las rusas.
Sin embargo, recientemente, la inteligencia militar de Ucrania ha difundido lo que —asegura— son documentos oficiales que ordenan la reubicación del personal militar.
“El telegrama enumera una lista de medidas para la ‘reposición’ urgente de las unidades de la unidad rusa mediante la selección de personal de entre los militares de los ejércitos combinados 8, 18, 49 y 58 del Distrito Militar Sur de las Fuerzas Armadas de Rusia“, aseguró el diario The Mirror.
Previamente, el Kremlin había confirmado su idea de solventar de manera diplomática la reciente crisis que ha surgido con Azerbaiyán, en relación con la serie de detenciones de ciudadanos azeríes que han sido respondidos con el arresto de periodistas rusos, derivando en la convocatoria de los embajadores de ambos países.
“Creemos que la lógica nos dice solo una cosa: Rusia y Azerbaiyán son y deben seguir siendo socios, aliados, cercanos, unidos por una historia en común”, dijo el portavoz del presidente Vladimir Putin, Dimitri Peskov.
Para Peskov, “todos los problemas que surjan deben resolverse de manera constructiva”, con base en el “espíritu general” de las relaciones bilaterales, según ha informado la agencia de noticias Interfax.
En los últimos días, las relaciones entre Moscú y Bakú se enfriaron de manera definitiva después de que las autoridades rusas realizaran una operación en la ciudad de Ekaterimburgo contra una decena de ciudadanos de origen azerí sospechosos de pertenecer al crimen organizado, que se saldó con dos de ellos muertos.
En respuesta, la sede de la agencia Sputnik en Bakú fue tomada por las autoridades azeríes, deteniendo a varios de sus trabajadores, dos de los cuales han sido acusados de trabajar para los servicios rusos de Seguridad.
Con respecto a esta cuestión, Peskov ha informado que las autoridades rusas están en contacto permanente con la representación diplomática en Bakú para defender los intereses de sus ciudadanos detenidos.
A esta crisis hay que sumarle el apoyo de Azerbaiyán a Ucrania, o la posibilidad de la responsabilidad rusa en la reciente tragedia aérea en la que un avión de Azerbaijan Airlines se estrelló en Kazajistán en diciembre de 2024, como algunos de los episodios que explican esta reciente escalada de tensiones entre Bakú y Moscú.
*Con información de Europa Press.